De hecho, durante las últimas semanas se ha estado produciendo un constante flujo de rumores respecto al posible porte de la suite Office de Microsoft a Linux. Si estos rumores fueran ciertos, simplemente confirmarían el interés de las grandes empresas por el sistema operativo y parecería más cercana la broma que hacíamos la semana pasada respecto a un posible MS-Linux.

El pasado otoño se hacía público un documento de uno de los abogados de Microsoft en el que explicaba claramente la postura de la empresa respecto a Linux. Sin embargo, en aquel entonces los llamados "Halloween Memos" no hacían ninguna mención a un posible porte de Office a Linux.

Esta semana, al ser preguntado Steve Sinorfsy, vicepresidente de Office sobre el posible porte, comentó que "No puedo hablar sobre este tema en este momento. Linux no ha llegado al usuario final todavía y existen muchas cuestiones a resolver antes de decidirnos a realizar este porte".

Sin embargo, por otro lado, algunos desarrolladores externos a Microsoft afirman que el creador de software ya ha pasado esa fase y que Microsoft tiene una unidad de desarrolladores trabajando en diversos aspectos de un posible Office para Linux. Un desarrollador anónimo comentó que "Estos técnicos de Microsoft trabajan en el equipo de desarrollo. Usan Linux en sus propios ordenadores. No creo que Microsoft tenga miedo de Linux, pero debería".

Los analistas comentan que si Microsoft se decide a crear un Office para Linux, tendrá que resolver ciertos problemas primero. Por ejemplo, portar aplicaciones Windows a Linux no es una tarea fácil, especialmente si las aplicaciones Windows están muy integradas al sistema operativo.

Microsoft, además, debería crear un modelo de negocio viable, a través del cual la empresa y sus socios consiguiesen dinero de una versión de Office de licencia abierta.